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Argelia posee una privilegiada situación
geográfica y relación con los países
colindantes, de África del Norte y
subsahariana, con los Países Árabes del Golfo y
con la UE.
Su economía está marcada por el altísimo peso
de la explotación y exportación de
hidrocarburos (98 % de las exportaciones), así
como por todavía un débil tejido industrial.
El Gobierno es ahora consciente del futuro
declive de la producción de hidrocarburos, al
menos mediante fórmulas de extracción
convencional, y de la consecuente necesidad de
diversificar su economía.
Una de la principales prioridades es la
atracción de inversión extranjera, la
transferencia de tecnología y el know-how. El
Gobierno ha llevado a cabo políticas
proteccionistas en lo que respecta a su
industria y a la entrada de inversiones
extranjeras, imponiendo el “partenariado” (con
socios nacionales) como única figura para el
establecimiento de industrias y empresas
extranjeras en el país, variando el porcentaje de
participación nacional en función de la
actividad que desarrolle la empresa.
Si bien persisten sectores estratégicos
dominados por el sector público, que
representan el 51,8 % del PIB, el Gobierno
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está incentivando la inversión privada en
industria agroalimentaria, textiles, de
materiales de construcción, ensamblaje de
bienes de equipo y otros sectores que
representan excelentes oportunidades.
Las importaciones de “bienes y servicios”
representan más del 30 % del PIB, de las que
el 70 % son bienes industriales, productos
semielaborados, bienes de consumo y
alimentos.
El Gobierno también ha diseñado Esquemas
Nacionales de Acondicionamiento del
Territorio (para el desarrollo equitativo del
país) y de Acondicionamiento Turístico con
horizonte 2025.
Estos planes suponen la mejora de las
infraestructuras y el fomento del turismo,
asumiendo que es una de las alternativas a los
hidrocarburos y será el nuevo motor de
desarrollo sostenible y un vector económico
clave.
Junto a estos programas estatales, destacan
también los proyectos de construcción de
vivienda social, el Plan de rehabilitación
Agrícola y Rural y el Programa Nacional de
Desarrollo de Energías Renovables. Argelia
está llamada a jugar un papel protagonista
como proveedor energético interregional, más
allá de sus hidrocarburos.
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